La diferencia de edades no es un obstáculo cuando la pareja tiene en claro lo que siente, y qué esperan de esa relación. Dependiendo de la edad a la que inicia la relación y el número de años de diferencia entre ellos, la relación puede ser más complicada. En ocasiones estas parejas despiertan ciertas dudas y recelos en familiares y amigos y no siempre son aceptadas socialmente.
La atracción tiene que ver con necesidades psicológicas no resueltas y que lo fundamental no va ligado a lo físico, sino a la personalidad, la sabiduría y al poder que simboliza una persona con experiencia. En los tiempos actuales, cada vez es más común encontrar parejas que cuentan al menos más de diez años de diferencia entre ambos. Si bien la tendencia, histórica por lo demás, sigue siendo mayoritaria en cuanto a hombres mayores que se unen con mujeres menores, los especialistas aseguran que existe un claro aumento de relaciones inversas, es decir, en que la mujer tiene más edad que su pareja.
Un factor muy importante es la falta de cariño, atención, amor, confianza, de una madre o de un padre ya que buscas esos sentimientos y cualidades en una persona mayor. Buscas a una persona que te haga sentir, experimentar, que te enseñe, que te muestre que a su lado estas segura, en algunos casos es así.
Cuando yo iba en la secundaria, cursando el 3° año pase por una situación similar en el que el hombre era 10 años mayor (ella 15, él 25). Al principio mi madre lo acepto pero no con cierto convencimiento, incluso mi mamá me pidió que él hablara con ella acerca de esto porque este tipo de situaciones cuando la mujer o el hombre es menor es penado por la ley, él decidió hacerlo. Todo era perfecto al principio, me sentía protegida, con seguridad. Al paso de 4 meses todo fue cambiando, él se deprimía porque pensaba que a mi edad todavía podía conocer a más chavos y entonces creía que por su edad ya no se iba a enamorar, al final de esto decía que la edad si era importante y ponía de pretexto su trabajo y sus estudios. (testimonio: Anónimo).
Cuando yo iba en la secundaria, cursando el 3° año pase por una situación similar en el que el hombre era 10 años mayor (ella 15, él 25). Al principio mi madre lo acepto pero no con cierto convencimiento, incluso mi mamá me pidió que él hablara con ella acerca de esto porque este tipo de situaciones cuando la mujer o el hombre es menor es penado por la ley, él decidió hacerlo. Todo era perfecto al principio, me sentía protegida, con seguridad. Al paso de 4 meses todo fue cambiando, él se deprimía porque pensaba que a mi edad todavía podía conocer a más chavos y entonces creía que por su edad ya no se iba a enamorar, al final de esto decía que la edad si era importante y ponía de pretexto su trabajo y sus estudios. (testimonio: Anónimo).
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Con esto nos damos cuenta que no solo la persona mayor sufre sino que ambos, lo que provoca cierto traumatismo, fustración, depresiones, etc., en la pareja.
En general, los pronósticos de los especialistas no son muy auspiciosos para este tipo de uniones, ya que señalan que se trata de relaciones transitorias, siendo pocas las que llegan a envejecer juntas. «No duran más de cinco años, período tras el cual cualquier relación tiende a quebrarse o a consolidarse», comenta Zúñiga.
En este tipo de uniones el atractivo físico ni el atractivo sexual son los fundamentales. Lo que más atrae es la sabiduría, la personalidad, el poder que tienen, la cultura y la experiencia, eso es lo que simboliza una persona mayor.
SEXUALIDAD
La mujer alcanza su mayor intensidad sexual cuando el hombre empieza a decaer. El hombre tiene su peak a los 18, y a los 30 empieza su decadencia. Sin embargo las mujeres es al revés, comienzan a tener una vida sexual satisfactoria después de que nacen sus hijos, como por los 30.
Por ello cerca de los 60 años son pocos los varones que se mantienen activos a un nivel satisfactorio para una mujer joven. En ese sentido, no resulta extraña la unión entre un hombre de 25 años y una mujer de 40 o 45, ya que ambos están en su apogeo sexual.
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